La auto-evaluación como práctica promotora de la democracia y la dignidad.
Buenas a todos/as, soy Ana Ortiz y a continuación os hablaré de las
conclusiones que he sacado tras la lectura de este artículo.
Primero hablaré de la auto-evaluación y debo decir que me he sentido muy
identificada en muchos de los ejemplos que muestra este texto, esto se debe a
que nunca he tenido la oportunidad de auto-evaluarse en ninguna asignatura,
hasta este año.
Durante toda mi etapa educativa mi papel ha sido de alumno pasivo, por lo tanto,
tras indagar más sobre el tema de la auto-evaluación he sido consciente de la
importancia que tiene, y el poco caso que le hacemos. Es importante cambiar de
mentalidad, pero esto no se podrá llevar a cabo hasta que los docentes y el
alumnado se implique de la misma manera.
Cuando me enteré de que en esta asignatura me tenía que auto-evaluar me
sentí rara y con mucho miedo, ya que no lo había hecho antes y siempre me
habían asignado una nota, la que el docente veía conveniente, sin tenernos en
cuenta, sólo basándose en un examen, y es por ello que a continuación hablaré
de algunos mitos que me han llamado la atención.
Primero hablaré del mito de la naturalidad de las notas, tras leer la
frase “las notas son una invención con finalidad puramente administrativa” me
puse a reflexionar y realmente la única finalidad que tiene “las notas” es para
clasificar al alumnado, y de esta forma motivar o desmotivarlos. En mi caso,
desde bien pequeña he sido una niña que le ha costado estudiar y por ello le
dedicaba muchas horas para luego conseguir resultados que pienso que no me los
merecía. A lo largo de mi vida me he llegado a plantear si sinceramente podría
sacarme algún título educativo, esto se debe a la desmotivación que sentía y no
veía ninguna salida. Esta forma de evaluar al alumnado tendría que cambiar, no
creo que ninguna persona deba sentirse inferior a otra, y mucho menos en el
tema educativo, menos una nota numérica la cual no define tu inteligencia
ni tu conocimiento.
Tras seguir leyendo el texto se habla de la nota de acceso de la
universidad, y cada vez que se habla de ese tema recuerdo el mal trago que
pasé, primero de todo porque me gradué en segundo de bachillerato sin
saber una nota de recuperación, es decir, no sabía si iba a tener la
oportunidad de presentarme al selectivo. Una vez supe que me podía presentar
estaba feliz, pero no sabía la que se venía encima, creo que fue la peor semana
de mi vida, me volví a replantear lo de los estudios, me sentía agobiada y con
mucha presión, ya que la nota que sacase en las pruebas PAU sería la que
determinase mi futuro.
Durante toda la lectura, me venían recuerdos a la cabeza concretamente las
clases impartidas en esta asignatura, de las primeras clases teóricas, de los
círculos que formábamos al final de la clase para extraer nuestras propias
conclusiones. Sinceramente creo que has plasmado muy bien el tema de la
auto-evaluación en nuestras clases.
Antes de pasar a hablar sobre mi auto-evaluación, me gustaría comentar que,
para poder trabajar de esta forma en clase, es importante tener en cuenta
varios aspectos, mostrar más confianza en nosotros mismos, respetarnos tanto a
nosotros como a los compañeros de clase y debemos dejar de lado el tema
“control” en el alumnado, hay que confiar en ellos y tener el pensamiento que
están en tu clase aquellos que realmente tienen interés por aprender.
Obviamente como dice en el texto hay casos que no se ajustan a la realidad,
personas que no son honestas consigo mismas, que deciden auto-evaluarse con
más nota de lo que le pertenece, pero eso solo son en sucede en casos excepcionales.
Tras haber reflexionado sobre este
artículo, a continuación, explicaré los puntos que recogería mi auto-evaluación:
- He publicado las entradas del
blog antes de la fecha establecida.
- He publicado todos los trabajos
en el blog, tanto trabajos grupales como individuales.
- He entregado el teatro de pies
y le he puesto interés.
- He entregado el trabajo “Cómo
trabajar el miedo en clase”.
- He participado en las clases
online.
- He mostrado interés en cada una
de las clases.
Para concluir mi entrada en el blog, me
gustaría dar las gracias a Jorge por hacernos llegar este fragmento de libro,
que por lo menos a mí, me ha abierto los ojos y me ha hecho reflexionar.
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